Desde principios del siglo XIX, con la aparición de la máquina de vapor, hasta nuestros días, la industria ha avanzado a pasos agigantados gracias a los nuevos descubrimientos tecnológicos y al empleo de máquinas que son capaces de realizar por sí mismas ciertos trabajos. Pero, si hasta llegar a nuestros tiempos ha sido un recorrido de transformaciones, es el internet de las cosas lo que ha revolucionado todo este sector. La capacidad de comunicación interna conlleva numerosas ventajas y procesos mucho más eficientes. Es lo que se denomina la industria 4.0, y su implementación permite un aumento en la producción y una disminución en los costes. Y para conseguirlo, numerosas empresas necesitan conocer los pasos de una automatización industrial si quieren beneficiarse de todo ello.
Por qué emplear un sistema de automatización industrial
Las nuevas tecnologías suponen grandes oportunidades en el mundo industrial y facilitan el funcionamiento en procesos de producción. Los proceso de fabricación de los productos consisten en una repetición infinita de acciones, hecho para la que fueron creadas las máquinas. Si además, estas pueden estar conectadas entre sí y parametrizadas a través de un software donde se tenga acceso a datos en tiempo real, esto permite un mayor control en el funcionamiento del sistema.
El internet de las cosas permite una conexión interna en todos los automatismos que favorece el desarrollo de la actividad. Si a todo esto le sumamos la inteligencia artificial, el resultado es que se obtienen unos altísimos incrementos de eficiencia en el funcionamiento general. Todo esto permite una mayor supervisión en las operaciones, lo que conlleva en una optimización en la dirección de la empresa.
La robótica industrial está capacitada para realizar acciones rutinarias, con ello se consigue liberar al humano para que pueda realizar otro tipo de actividades, al mismo tiempo que minimiza riesgos en seguridad y accidentes. A este respecto, los robots de colaboración, o cobots, son capaces de tomar decisiones por sí mismos y de trabajar con los humanos, estableciendo de esta forma una sinergia muy positiva capaz de aumentar considerablemente la producción.
No cabe ninguna duda de que conseguir todo esto puede conllevar innumerables beneficios empresariales, pero para ello, debe ser implementada realizando un riguroso estudio de las condiciones actuales y de las futuras. Por ello son muchos los pasos de una automatización industrial que deben tenerse en cuenta.
Cuáles son los pasos de una automatización industrial
La mejora económica en los procesos productivos puede conseguirse mediante una disminución en los costes de fabricación y una mayor rentabilidad en la fase de producción. Ambas características conlleva la automatización; por un lado, prescindir de mano de obra física ahorra dinero, y por otro, una mayor rapidez en la cadena de fabricación aumenta el rendimiento. Estos son los principios de la industria 4.0, y cada vez más empresas la implementan en sus instalaciones.
Pero ¿cómo se realiza todo esto? Estos son los pasos de una automatización industrial:
- Una correcta planificación: Y para ello solo se puede conseguir conociendo el sistema actual e implementar técnicas automatizadas que lo mejoren. Y nadie mejor que una consultoría de procesos industriales que realice todo el proceso.
- Adaptación en el montaje: Parar la producción es algo nefasto para una empresa, por lo que el sistema debe irse implementando por fases o aprovechar una parada técnica controlada, de esta manera, se consigue un impacto mínimo mientras se consigue la adaptación de todo el sistema.
- Integración: Un sistema automatizado necesita ser capaz de entender las órdenes para su funcionamiento. Para ello, es necesario realizar una conversión analógica-digital de los parámetros necesarios en el proceso.
- Ajustes, programación y pruebas: Coordinar un nuevo sistema requiere la implicación del personal. Tanto operarios como responsables de mantenimiento deben acostumbrarse a la utilización de un nuevo proceso de trabajo, y para ello es necesario establecer un periodo de prueba para corregir y subsanar los problemas y deficiencias que puedan encontrarse en su funcionamiento. Acciones como parametrizar, programar y ajustar serán necesarias para todo ello.
- Verificación: El punto anterior debe continuar hasta llegar a resultados óptimos. Y aun así, es posible que se necesiten realizar unos ajustes finales antes de la aprobación final.
- Gestión en el mantenimiento: La utilización de máquinas implica una parte humana especializada que sepa como repararlas o mantenerlas con el fin de que no se paralice la producción. Para ello, debe formarse al personal de mantenimiento, o contratar una empresa externa que coordine estas actividades.
- Minimizar averías: Uno de los elementos que más problemas ocasiona es el cableado de las máquinas. Usar tecnologías de redes inalámbricas o wireless, facilitará mucho esta labor.
Sistemas de control en la automatización industrial
Todo lo hablado anteriormente no tendría sentido si no se pudieran controlar todas las variables del proceso. Una buena gestión y una correcta planificación son aspectos claves para ello, por lo que controlar en todo momento todos los datos se hace absolutamente necesario. Y para ello están los sistemas de control.
Estos elementos funcionan con aplicaciones informáticas donde pueden ir controlando todos los aspectos como la necesidad de materias primas, la finalización de los pedidos en curso, o qué es lo que está haciendo y cuánto tarda en realizarlo cada máquina. Contar con toda esta información es esencial para una buena supervisión, y además, la labor directiva se simplifica sobremanera.
Dentro de los pasos de una automatización industrial, los sistemas de control no pueden faltar, y deben tener las siguientes características:
- Herramientas de control: Necesarias para supervisar los procesos automáticos. Pueden ser indicadores, pantallas, alarmas o sirenas.
- Facilidad en la supervisión: Todos los parámetros y medidas deben estar disponibles en todo momento, tanto en tiempo real como su estimación futura.
- Internet de las cosas: Tanto el conocimiento del estado como la transmisión de los datos interna es fundamental. Esto implica el prestar especial atención al sistema de comunicación elegido. Si hay errores en este apartado, el sistema de control no valdrá para nada.
Todo lo expuesto hasta ahora indica que los pasos de una automatización industrial deben estudiarse al milímetro para una implementación eficaz del sistema. El uso correcto de la tecnología proporcionará grandes beneficios empresariales, ya que bajarán los costes de fabricación y aumentará considerablemente la productividad. Y para ello, nada mejor que el asesoramiento profesional de ACP automatismos, contacta con nosotros y conoce todo lo que la industria 4.0. puede hacer para mejorar el rendimiento de tu empresa.